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Se levantó y con los ánimos enmarañados , buscó la manera de escapar. Sus pies ardían , sentía en las plantas de los pies el peso de un cuerpo moribundo que le exigía un descanso inmediato , pero ¿Cómo ofrecerselo? Si un minuto de descanso era entregarse desinhibidamente a su persecutor. Lo escuchaba constantemente , sus pisadas eran cada vez más cercanas , pero en su mente retumbaba constantemente aquel dicho que desde niño su abuela le decía: "si sientes que está lejos , es porque realmente está cerca. Si lo escuchas tan cerca que te atemoriza , relájate , está demasiado lejos como para hacerte daño" lo asociaba con el mito del silbon , porque era lo único que su mente podía procesar , mientras el miedo le carcomía la cordura. Quería convencerse de que se presencia era imperceptible ante el ser que lo perseguía , pero era imposible pasar desapercibido , el líquido rojo metálico que se expandía por su anatomía , desde los cesos , hasta aquellos pies , que le gritaban con desesperación: "detente". Él solo era capaz de escuchar los pasos , los susurros , los murmullos de aquel ser , que él atendía con rostro serio y con ahínco intentaba disimular. Pareció un sempiternidad , hasta que después de tanto huir , entró a una habitación de donde convergía un cuadro transparente , que permitía ver un universo paralelo , desde sus ojos podía observar a través de él una casa pintoresca y bonita , todo parecía estar bien allá. Su mente procesó que quizás había una remota posibilidad de poder huir a través de él , quizás si lograba atravesar ese portal que lo llevara a aquel mundo alterno , lograría huir definitivamente. El ser tras el cuarto , golpeaba con fuerza la puerta , primero con la palma y después con los puños. Ese sonido de compás constante alteraba su atención. No podía concentrarse , porque en su mente se reproducían con mayor fuerza. Respiró hondo y decidió hacer el primer intento , tomó impulso y dió la primera estocada contra aquel cuadro , chocando con fuerza su cuerpo contra el , siguiendo el compás de los puños , aquellos que se repetían en su mente como si se tratara de un tambor anunciando la entrada triunfal de algún rey. Dió una segunda , una tercera y un sin fin de estocadas contra el cuadro transparente , hasta que toda la habitación quedó en total silencio. El ser tras la puerta logró entrar por fin a aquel cuarto que estaba acompañado por utensilios comunes de un baño , cómo el inodoro , la duchas , el lavamanos y un espejo. Este último estaba ensangrentado y en el centro estaba fracturado totalmente con la cabeza inerte del chico contra el espejo , el color rojo era el espectáculo central de aquel lugar que de paredes blancas , se tiñó con el color escandaloso de la sangre. Restos del espejo destrozado estaban en el piso , aquel chico estaba magullado y con diferentes cortadas , algunas abruptas , cómo las del espejo y otras intencionales cómo las que estaba en su muñeca. ,
